A partir de 1 de enero de 2019:
* Sólo se utilizará amalgama dental en forma de cápsulas pre dosificadas, el mercurio a granel será prohibido.
* Los gabinetes dentales donde se trabaje con amalgama deben contar con separadores para recoger y retener las partículas, incluyendo las que se encuentran en el agua usada. Dichos separadores deberán garantizar un nivel de retención mínimo del 95%, siempre y cuando se hayan instalado tras el 1 de enero de 2018.
Desde el 1 de julio del año pasado NO se puede utilizar amalgama en el tratamiento de dientes de leche, de menores de 15 años ni en mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.
En mis clínicas no se usa la amalgama dental desde hace ya 10 años. No se usan bisfenoles ni formocresol.
¿Por qué? Porque el mercado te ofrece alternativas no contaminantes, y el desarrollo de biomateriales regeneradores de dentina permiten recomponer la estructura compleja del diente, recuperar el comportamiento frente al esfuerzo masticatorio y la máxima conservación de tejido sano.
En las clínicas usamos Vidrios ionómeros bioactivos,  CPP-ACP, ionómeros vítreos, cementos de vidrio, flúor, resinas compuestas, calcio, silicato de calcio, y seguimos avanzando.